España, octavo país del mundo con los políticos más corruptos, según Transparencia Internacional.

España, octavo país del mundo con los políticos más corruptos, según Transparencia Internacional, y tampoco sale bien parada en otras estadísticas sobre corrupción.

La operación Púnica y las “tarjetas opacas” de Caja Madrid y Bankia son los dos últimos grandes escándalos de corrupción política en una España que en los últimos años se ha colocado a la cabeza en ránkings sobre delitos de este tipo. Comentaba esta semana Joaquim Bosch, magistrado de Jueces para la Democracia, en Cuatro que “tenemos el mayor número de corruptos de Europa y el menor número de jueces”.

Magistrados como Ruz, Velasco o Andreu, de la Audiencia Nacional, copan cada día portadas por la instrucción de casos de corrupción en los que están involucrados nombres de la relevancia política de Rodrigo Rato o Francisco Granados. Para Transparencia Internacional esto se traduce en que España obtiene una puntuación por debajo de la media: 4,4, una nota que solo es peor en siete países: Nigeria, Nepal, México, Grecia, Italia, Jamaica y El Salvador.

El Barómetro Global de la Corrupción de Transparencia Internacional mide la corrupción en 107 países. Tampoco sale bien parada España en los datos del Banco Mundial, con los que la agencia Fitch ha elaborado una mediana en la que incluyen otros países a los que otorga nota “BBB” como a España. Son países triple B también para la agencia Italia, Kazajstán, México, Perú, San Marino, Eslovenia y Tailandia.